El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa del sistema nervioso central; es decir, consiste en la muerte progresiva de las neuronas en una parte del cerebro. En consecuencia, el paciente sufrirá una pérdida neuronal importante, causando una disminución en la dopamina y finalmente, disfunciones en el movimiento.
Es cierto que conforme la enfermedad avanza, los síntomas suelen volverse más intensos e invasivos o puede suceder también que la medicación no la controle tan bien. En este caso, es recomendable seguir algunos consejos para ayudar a que la rutina diaria sea más llevadera y mejorar, en cierta medida, la calidad de vida del paciente. Es importante recordar que la enfermedad de Parkinson no tiene cura hasta el momento y sus tratamientos tienen como único fin, reducir sus consecuencias y brindar una mejor vida a quien la padece.
He aquí algunos consejos por categoría:
Para la alimentación:
- En primer lugar, se aconseja beber abundante agua (entre 8 y 10 vasos al día). El agua fría puede ayudar a tragar mejor, ya que estimula el reflejo de deglución.
- Se debe separar la hora de las comidas de la hora de la toma de medicinas.
- Utilizar cubiertos menos pesados y platos/vasos que permitan sostenerlos con firmeza.
- Dar preferencia a alimentos como papilla o coladas, ya que son más fáciles de tragar que incluso los alimentos finamente picados.
A la hora de comer, es normal presentar dificultades para masticar y tragar. Aquí te contamos cómo facilitar este momento:
- El paciente debe intentar comer lentamente y tomando pequeñas porciones en cada bocado.
- Para tragar: mantener los labios cerrados y los dientes juntos. Poner la comida en la lengua, levantarla hacia arriba, luego hacia atrás y finalmente tragar.
- Masticar por un lado y luego por el otro.
- Evitar poner comida adicional antes de haber tragado el bocado anterior.
Para la movilidad:
Los temblores en el cuerpo irán apareciendo y aumentando. Para reducirlos, se recomienda apretar el codo de la extremidad afectada contra el lado (costillas) del paciente y así estabilizar la parte superior del brazo. Para superar las dificultades a la hora de caminar, el paciente debe ponerse de pie, apoyar los talones sin inclinarse hacia atrás y balancearse sin moverse de su sitio, hasta que esté listo para continuar
Adicionalmente, existen masajes y otras terapias adicionales que pueden ayudar. ¡Realízalas de la mano de expertos en cuidado! En Ser y Estar estamos 24/7 listos para cuidar de los que amas.
Aquí te contamos cuáles:
- Masajes
- Hidroterapia
- Cinesiterapia